Entre el 3% y el 5% de los pacientes medicados con estatinas padecen algún tipo de miopatía, es decir, una enfermedad muscular. «Los efectos secundarios de las estatinas pueden manifestarse como una simple alteración en los análisis o con un cuadro más sintomático de debilidad y dolor muscular, es decir, provocar una miositis, que es una inflamación del tejido muscular», afirma el doctor Estaban Salas, reumatólogo del Departamento de Salud, durante la III Jornada de Actualización en Miopatías, organizada por la sección de Reumatología del Departamento de Salud de la Marina Baixa.
Las miopatías son un grupo muy extenso de enfermedades caracterizadas por la pérdida de fuerza o debilidad muscular, a veces, generalizada y, otras, más limitada a ciertas áreas corporales. En la mayoría de los casos, son de curso crónico y progresivamente invalidantes. «Las de carácter congénito aparecen en la infancia, pero otras se manifiestan en la edad adulta», dice el doctor Salas. «Pueden deberse a enfermedades endocrinas, intoxicaciones, infecciones, trastornos de la inmunidad, enfermedades cancerosas, defectos genéticos o degeneración neurológica, entre otros».
El tema de las miopatías ocasionadas por estatinas ha sido uno de los ejes del encuentro entre especialistas. «El paciente debe conocer los síntomas», advierte el doctor Vilchez, jefe del servicio de Neurología del Hospital La Fe de Valencia. «En más del 90% de los casos de intolerancia se resuelven ajustando la dosis o cambiando el tratamiento. Solamente en un porcentaje muy minoritario de casos, el daño muscular sigue una vez retiradas las estatinas, condicionado probablemente por otros factores o circunstancias que son objeto de investigación y estudio».
Estos factores individuales pueden influir a la hora de presentar una mayor sensibilidad a estos síntomas, así como también influye la toma de otros medicamentos, por lo que es importante que el paciente advierta a su médico de que está tomando otra medicación, advierten los expertos.
Entre el 3% y el 5% de los pacientes medicados con estatinas padecen algún tipo de miopatía, es decir, una enfermedad muscular. «Los efectos secundarios de las estatinas pueden manifestarse como una simple alteración en los análisis o con un cuadro más sintomático de debilidad y dolor muscular, es decir, provocar una miositis, que es una inflamación del tejido muscular», afirma el doctor Estaban Salas, reumatólogo del Departamento de Salud, durante la III Jornada de Actualización en Miopatías, organizada por la sección de Reumatología del Departamento de Salud de la Marina Baixa.Las miopatías son un grupo muy extenso de enfermedades caracterizadas por la pérdida de fuerza o debilidad muscular, a veces, generalizada y, otras, más limitada a ciertas áreas corporales. En la mayoría de los casos, son de curso crónico y progresivamente invalidantes. «Las de carácter congénito aparecen en la infancia, pero otras se manifiestan en la edad adulta», dice el doctor Salas. «Pueden deberse a enfermedades endocrinas, intoxicaciones, infecciones, trastornos de la inmunidad, enfermedades cancerosas, defectos genéticos o degeneración neurológica, entre otros».El tema de las miopatías ocasionadas por estatinas ha sido uno de los ejes del encuentro entre especialistas. «El paciente debe conocer los síntomas», advierte el doctor Vilchez, jefe del servicio de Neurología del Hospital La Fe de Valencia. «En más del 90% de los casos de intolerancia se resuelven ajustando la dosis o cambiando el tratamiento. Solamente en un porcentaje muy minoritario de casos, el daño muscular sigue una vez retiradas las estatinas, condicionado probablemente por otros factores o circunstancias que son objeto de investigación y estudio».Estos factores individuales pueden influir a la hora de presentar una mayor sensibilidad a estos síntomas, así como también influye la toma de otros medicamentos, por lo que es importante que el paciente advierta a su médico de que está tomando otra medicación, advierten los expertos.
Xarelto 10 mg Tablet is a prescription medicine used to reduce the risk of stroke and blood clots in people with atrial fibrillation, not caused by a heart valve problem.
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